Alrededor de 50 personas han participado en un encuentro muy especial de inicio de verano en el marco del programa Soledad Cero. A través de un desayuno han vuelto a cruzar sus miradas las personas usuarias y las voluntarias del Teléfono Amigo, así como las profesionales del Servicio de Apoyo a las Familias, Ocio y Voluntariado. Se trata de una cita que ya es tradición en la entidad desde hace años y se repite, de forma cíclica, para fortalecer el encuentro y los vínculos entre las personas.
La presidenta de ASANSULL, María Luisa Escribano, estuvo también presente en el encuentro, así como una representación de profesionales de Enfermería a quienes agradecemos especialmente su presencia por su manifiesto compromiso: Laura Valcárcel Broso, enfermera de familia y comunitaria de Velada; Maribel Padilla Monterrey, del Centro de Salud Levante, Sandra Martínez Serrano, del Centro de Salud San Roque; y a Enrique Cana Benítez, del Centro de Salud Levante.
Estos profesionales no solo acompañaron en esta jornada, sino que además ofrecieron a las personas mayores información y recomendaciones clave sobre los cuidados ante el calor y cómo protegerse durante el verano.
Gracias a todas las personas que hacen posible estos momentos que fomentan la cercanía, la información útil y, sobre todo, la compañía.
Soledad Cero es un programa que nace en ASANSULL a través del impulso del Área de Apoyo a las Familias, Ocio y Voluntariado por ayudar a paliar la soledad no deseada. Muchas de las personas usuarias suelen decir que si no fuera por el voluntariado que hay detrás de este programa, ya sea por el Teléfono Amigo o por las visitas domiciliarias, el día podría pasar sin una llamada o sin que sonara su timbre.
Con el programa Soledad Cero ‘Proyecto de atención y acompañamiento a personas en situación de soledad no deseada’ se actúa en varias líneas de intervención como la creación de una Red de Apoyo informal que ayude a identificar y combatir situaciones de soledad no deseada y aislamiento; apoyar a personas que se sientan solas; visibilizar recursos y proyectos para generar oportunidades; así como fomentar la problematización pública de la soledad no deseada como una cuestión social a la que hacer frente de forma comunitaria.